Hoy decidí


Quedarme en unos brazos con la valentía de que alguien desea estar conmigo, propongo que todo será sentir dejarme llevar y no seguirme marcando por mi triste pasado.
Deseo su piel aunque sea una noche hasta que decida alejarme.
De pronto soy prisionera de mis propios sentimientos, prisionera del dolor de mi pecho lo amarro, lo encierro, lo lloro u continuo con el luto de mi alma donde no quiero merecer a nadie ni se de nadie.
Fui alguna vez tan llena de vida, sin más dolores que el de no hacer el amor, de pronto encontré más razones antes para vivir que hoy.
Hoy que tengo mucho menos que antes solo aprendí a perder mucho más aún, aprendí a que me importe menos perder personas y sentimientos.
Aprender a experimentar el límite del dolor encontrar algo más duro que tu pecho querer dormir el viernes y no despertar el lunes para que la mente descanse y olvides algunos días que preferiría no recordar jamás.

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