Diario del Pasado



Los recuerdos del pasado no vivido en unos labios no amados, el desatino de las palabras, lo grande que significa amar y ser correspondido mientras el tiempo paso inexorablemente indetenible hoy aún recuerdo como el pasado se marchó tantas veces.
Me pregunto qué paso conmigo y como me perdí en mis cuerpos, un pequeño escalofríos en la espalda me recuerda que debí ser otra persona siempre estuve equivocada de ser quien era tantas veces no fui quien deseaban los demás y jamás trate de agradarlos ese el castigo de mi soledad.
Hay peligros que no deberíamos enfrentar si no evitar, con el tiempo aprendí que el pasado ha sido el único peligro que ya no se puede evitar, mientras más a solas estoy más triste es mi vida cuando trato de buscar a alguien solo es un error más.
Tengo frío de tanta soledad, pero alguien quiere acompañarme y simplemente encuentro todas las razones para alejarme completamente así soy una creyente de la soledad eterna ya deje de llorar solo me falta dejar de beber, de fumar, de amar a quien no me corresponde, de esperar demasiado de las personas, de seguir esperando.
Sin embargo empecé hoy este diario en medio de la lluvia esperanzada a de deshacerme de todos esos recuerdos que hoy ya deberían ser nulos y no amargos como la primera vez, como mi silencio, como mi amargura, como ese dolor en el pecho que no se cura con nada, aprender de la muerte de los recuerdos, de los que no están y de los que jamás volverán.
Recuerdo que dedicaba vuelo de palomas blancas a cualquier recuerdo y a cualquier olvido, nunca me quede demasiado tiempo con alguien mis explosiones verbales nunca han sido buena compañía para nada y en fondo soy romántica, creo en el amor, en las almas gemelas en los mejores momentos en la felicidad de reencontrarse con alguien que te amo en todas tus vidas.
Me gusta mi soledad por momentos, cuando la gente habla afuera se ríen del mundo y yo me amargo por él, mientras reposo en minutos crueles donde espero continuamente algo que no sé qué es.
Quisiera estar más sola aún que nadie sepa que existo creo que ya es mi realidad, mirar en la distancia la felicidad de los demás sin envidiarlos espero que sigan su camino y trato de no seguir mirando no es que no desee ser feliz es que me da tanto miedo volverme a equivocar que cuando abro la puerta lo hago por micro segundos y pasa alguien que no quiere quedarse eso duele entonces para que abrir la puerta mejor no.
De pronto la duda entra en mi pecho y me pregunto cuánto tiempo más podré seguir a solas sin nadie a quien amar

Comentarios

Entradas populares de este blog

Tiempo para hacer las cosas que no vivimos

MIS LECTURAS